CONSEJOS PRÁCTICOS

Revisa periódicamente el nivel de aceite del motor. Hazlo en una superficie nivelada y con el motor parado (en caliente, después de haber conducido unos kilómetros).
Comprueba con regularidad el líquido del limpiaparabrisas. No utilices las escobillas con el cristal seco, pues el polvo y la suciedad pueden dañarlo.
Verifica con regularidad la presión y el dibujo de los neumáticos. Sustitúyelos si el dibujo tiene una profundidad inferior a 3 milímetros.
Espera a que el vehículo se caliente si deseas acelerar fuertemente o llevar el motor muy revolucionado.